29 de Octubre 2004

Barro en los zapatos

El Sol de la oportunidad se cierne sobre el negro cielo, que amenaza lluvia en esta tarde gris. Las primeras gotas resbalan sobre mejillas que se alzan para contemplar el último atardecer.
Cuando se sabe que la lluvia calará hondo, cuesta salir con el paraguas en la mano, ya que es más reconfortante cerrar los ojos y notar el agua fría en la cara mientras el olor a tierra mojada invade el ambiente.
Es divertido caminar por la calle sorteando los charcos y echando una carrera al autobús que no llegaste a coger.
Ver que un extraño te mira fijamente porque llevas la música un poquito más alta de lo normal… Pero da igual, suena mi canción…
Hojas secas en el parque; barro en los zapatos que recorren tantos metros de pasillo al día, y contrastan con el blanco inmaculado de la novedad cada mañana.

Escrito por berges a las 12:30 AM | Comentarios (0)

16 de Octubre 2004

Reglas

Miras a través y no alcanzas ni a ver lo que te propones.
La importancia se transforma en melancolía con un toque de humor bastante irónico.
Si los sueños se volviesen realidad, mis carcajadas resonarían en tu eco.
Si sigues el juego, deberás saber retirarte a tiempo.
Las reglas no las marqué yo, recuérdalo.

Escrito por berges a las 7:58 PM | Comentarios (2)

13 de Octubre 2004

Té y alcohol

"Objeto de mis deseos, que alcanzar no puedo
ni decir que mañana iré a tu encuentro
mi noche ha envuelto al día en su veste
desde el alba, siendo iguales su comienzo y fin
y yo me engaño con falsas ilusiones
como tu encuentro, que la fortuna niega."

(Avempace)

Por los pilares de este año, que han sido... especiales.

Escrito por berges a las 2:01 PM | Comentarios (0)

4 de Octubre 2004

Pasos

Sin la sal de las aguas,
caminaba mirando su reflejo.
Deseaba tanto estar allí...
Supo que el alba no espera
ni siquiera al mejor postor.
Levantó el brazo
inclinando la cabeza,
tal y como había ensayado
tantas veces frente al espejo.
Sus labios alcanzaron
un gesto de preocupación
al caer en la cuenta
de que no recordaba los pasos.
Se adentró en el lago
sin saber a dónde ir.
Y en el árbol que marca el ritmo,
se sentó a escuchar la melodía
que las pequeñas hadas producían
bailando sobre el agua.

Escrito por berges a las 8:05 PM | Comentarios (0)